Kenia es el país de África con mayor índice de urbanización, una economía emergente atractiva donde las haya. Tiene una posición geográfica clave en la zona este del continente, con el mayor puerto de toda la costa y un importante legado agrícola dejado por los colonos ingleses. La ciudad de Nairobi es considerada el HUB tecnológico de África, donde nació la banca móvil a través del servicio telefónico. Sí, sin necesidad de tener internet en el móvil, puedes hacer cualquier transferencia, pagar la compra, el colegio de tus hijos o la televisión por cable, un sistema que mueve al día 20 millones de euros en transacciones.
Las posibilidades de que encuentres trabajo fijo en Kibera son mínimas, solo existe el trabajo temporal. Tu amigo conoce a un primo que tiene dinero y se muda; ahí que vas para ayudar y ganarte el pan para hoy. Empieza una obra en la zona del barrio en la que vives; aunque no tengas idea te apuntas. Mujeres que se prostituyen por 50 céntimos de euro, eso lo dice todo. El otro día escuchaba como un chico, después de darle una calada a un porro y mientras tiraba de un poste de madera de 10 metros junto con sus amigos, «Only the fittest survive, this is Darwins Law». Verdades como puños.
Esto es Kibera, el mayor barrio slum de África, y, quién te lo iba a decir, el que podría ser el lugar con más emprendimiento del planeta. Los negocios vienen y van, la gente apuesta a un todo o nada. No tienen nada que perder o no tienen otra opción cuando la tasa de desempleo ronda el 60%. Lo mires como lo mires, se trata de un acto de valor, una actitud que hace que la economía fluya y se cree un cambio. Hay esperanza en Kibera.
La gente pertenece a cooperativas o grupos de vecinos que sirven como paraguas para desarrollar su pequeño barrio. Se apoyan los unos a los otros a través del sistema «merry go round», un sistema de levantamiento de capital que consiste en que todos los participantes aporten una misma cantidad y se haga un sorteo para ver a quién le ha tocado la suerte esta semana. Solo puede tocarte una vez, y eso sí, el grupo se queda con la cantidad aportada por ti por si no vuelves a aparecer. Entre todos ahorran y llevan a cabo iniciativas que benefician a la comunidad, como construir unos baños o un tanque de agua.
Son estas comunidades de vecinos por las que Más Por Ellos apuesta, generando empleo y aportándoles conocimientos y experiencias, empoderándoles para que puedan reunir ahorros para mejorar su barrio… Es una apuesta que puede parecer arriesgada pero es la única manera de crear un desarrollo sostenible, un cambio que, al estar liderado por la propia comunidad, perdure. En eso cree Más Por Ellos.
Álvaro